Los alquileres en Europa costaban 233 euros más de lo que los inquilinos esperaban a cierre de 2024.
El proceso de búsqueda de un piso de alquiler comienza casi siempre e inevitablemente con el presupuesto que se va destinar a pagar la renta. En el último año, los inquilinos europeos han ampliado su partida inicial de gasto, mientras que la subida de precios se ha estabilizado, lo que ha provocado que la brecha del alquiler (el precio real de mercado y las expectativas de los usuarios) se haya reducido en casi todas las grandes ciudades del Viejo Continente. Sin embargo, hay dos localidades españolas que van a contracorriente del resto: Madrid y Valencia. La brecha de alquiler más amplia es la del municipio mediterráneo, que arrojaba una diferencia de 465 euros al mes a cierre de 2024.
Según desvela el Barómetro de la brecha del alquiler, elaborado por la plataforma de alquiler HousingAnywhere, el precio de los alquileres en Valencia subió un 12,7% en el cuarto trimestre de 2024, hasta los1.465 euros, mientras que el presupuesto máximo de los inquilinos se estancó en 1.000 euros, sin cambios respecto al año anterior. Esto provocó un aumento del 54,9% en la brecha, que se sitúa en 465 euros.
En cuanto a Madrid, la renta media se encareció un 7,7% anual, alcanzando los 1.616 euros; y los inquilinos aumentaron su presupuesto en un 8%, hasta los 1.400 euros. A pesar de este ajuste, la brecha aumentó un 5,9% interanual, situándose en 216 euros.
Fuente: El Economista