La normativa no les permite hacerlo antes, ni de forma anticipada.
Todo se debe a las cotizaciones acumuladas en su vida laboral.
¿A qué edad podré jubilarme? Es una pregunta que muchas personas se hacen a lo largo de su vida laboral, y no siempre cerca de esa edad de jubilación, dado que se trata de una situación a menudo deseada. El periodo de espera no es uniforme y varía en función de cada persona.
La razón es que en España hay dos edades de jubilación ordinaria, la edad a la que una persona tiene permitido jubilarse sin recurrir a anticipos. La vinculación de un trabajador a una u otra depende de los años que ha cotizado previamente.
La reforma de las pensiones de 2011 fue la culpable: con el objetivo de retrasar la edad de jubilación y frenar el gasto en pensiones se decidió alargar esa edad de jubilación en aquellos casos en los que el trabajador no acredite un nivel determinado de cotizaciones.
Aunque la reforma se aprobó en 2011, echó a andar en este aspecto en 2013 y, desde ese año y hasta 2027, incrementa la edad de jubilación anualmente siempre que no se acredite una cotización que también sube de ejercicio en ejercicio.
Es por eso que habrá personas que tendrán que esperarse de forma obligatoria hasta que llegue su edad de jubilación, una edad que será mayor que en otros casos, llegando a tener que esperar a los 66 años para jubilarse. Todo, claro está, por su cotización es inferior a la que le pide la normativa.
Fuente: El Economista